MÉXICO

Teresa Valdés Betancourt. 

¡Dos de cada tres niños, niñas y adolescentes en América Latina y el Caribe son víctimas de maltrato infantil con disciplina violenta desde el hogar! según un informe regional de Unicef.

La prensa asume con frecuencia los temas acerca de las múltiples formas que presentan las violencias, social, política, feminicida, a través de la pobreza extrema, el  narcotráfico, las migraciones impuestas, la trata de personas, la inseguridad, y las crisis humanitarias, por solamente citar temas cotidianos de las primeras páginas. En  todas, así de desmesurado existen protagonistas invisibles, como en el  tema migratorio, donde la población infantil y adolescente a veces acompaña a sus familiares y en otras desgraciadamente, van en solitario. ¿A qué se enfrenta una niña o un niño de cuatro a doce años caminando en solitario en las caravanas? ¡Qué indefensión!

La Unicef denuncia a través de un perfil estadístico, la violencia infantil y adolescente donde revela detalles por edades comprendidas entre 1 y 14 años, de quienes en la región, experimentan disciplina violenta desde el hogar, en la escuela y en la calle. Se identifica que, junto con el castigo físico y la agresión psicológica se detectó el abuso sexual y el homicidio que  acechan a la población infantil en América Latina y el Caribe y aporta un dato relevante: La tasa regional de homicidios de niños, niñas y adolescentes, 12,6 por ciento por cada 100.000 es cuatro veces mayor que la media mundial. Y el homicidio es la principal causa de muerte entre los adolescentes de diez a 19 años.

Youssouf Abdel-Jelil, Director Regional de Unicef para América Latina y el Caribe declaró que resulta terrible que la mayoría de los niños, niñas y adolescentes de América Latina y el Caribe estén expuestos a la violencia casi desde su nacimiento y, a menudo, por las personas en quienes más confían: sus madres y padres, cuidadores, familiares cercanos y hasta personas de la vecindad. https://www.unicef.org/

Como  la hidra, la serpiente gigante de muchas cabezas de la mitología griega, aparece  la violencia de género, cuando se explica cómo la violencia afecta de manera diferente según el sexo de las criaturas: los niños varones  tienen siete veces más probabilidades de morir por homicidio, armas blancas y de fuego  mientras que las niñas, son especialmente vulnerables a la violencia sexual  después de los diez años en su proceso de desarrollo corporal.

Está vigente después de 34 años de aprobada, aquel 20 de noviembre de 1989 existe la Declaración sobre los Derechos del Niño, que en 2014, agregó la palabra niña a sus textos oficiales,  donde se reconoce el papel de niños y niñas como agentes sociales, económicos, políticos, civiles y culturales, como logro histórico para los derechos humanos.

La Convención garantiza y establece normas mínimas a fin de proteger sus derechos en todas las circunstancias, pero  en América Latina y el Caribe, la violencia contra los niños, niñas y adolescentes continua impulsada no sólo por normas sociales y de género negativas, sino también por otros factores muy bien conocidos y son denunciados por la prensa porque en la región, dos de cada cinco niños, niñas y adolescentes viven en países sin protección legal contra el castigo corporal en el hogar, en la escuela y en los lugares de atención estatal.

Colegas, la prensa tiene las condiciones para conformar opinión pública, para influir más en la toma de decisiones políticas y legislativas que cambie esta realidad que viola sus Derechos Humamos. Niñas, niños y adolescentes tienen que disfrutar de adecuada nutrición; acceder a servicios de salud sexual y reproductiva; asistir a la escuela y que se solucionen sus necesidades con presupuesto gubernamental para resolver esta emergencia y verdadera crisis humanitaria que compromete el presente y al futuro de nuestros países de América Latina y del Caribe CESE LA INDIFERENCIA HACIA LA VIOLENCIA INFANTIL! 

@Letra Clara