Hoy quiero presentarles a, una maravillosa mujer, creadora, imaginativa, que ha entregado su vida al servicio de las mujeres, de los niños de su país y la sociedad entera. La Licenciada Amparo Andrade Loaiza es como un dulce cervatillo que observa la vida desde el ramaje de la literatura, que sueña y permite que todos soñemos con ella.Acá les dejo una entrevista que ha esperado tiempo para ser presentada y hoy 14 de noviembre, se las entrego como homenaje al Día de la Mujer Colombiana.
1.- Cuéntanos ¿quién es Amparo Andrade Loaiza?
-. Amparo Andrade Loaiza es una mujer que le apuesta al valor de las palabras, que sueña con un mundo más justo en el que sonreir y amar sea posible, sin que medie en ello la desgracia. Por eso es poeta, maestra, abrazadora y revolucionariamente feliz.
2.- Tus escritos y poesía, ¿a quiénes van dirigidos?
-. Escribo para todas y todos los que llevan el oído bien conectado al corazón, es decir que saben escuchar con todo su cuerpo y todos sus aprendizajes y experiencias. Quizá alguien podría preguntarse si los poemas que he escrito para niños no son para los adultos, pero sí, son para las niñas y niños que crecieron y olvidaron el camino de la libertad, para ellos también son. Pero también escribo poesía amorosa y erótica. Sé que, cuando es el tiempo, cada quien se encuentra con las palabras que necesita. Así que escribo para que el universo continúe cultivando palabras para que tengamos muchas maneras de decir lo que necesitamos decir.
3.- Tienes un extenso currículo, de todo lo que has escrito o hecho, ¿qué es lo que más te llena el alma?
-. Creo que cada uno de mis escritos, académicos o literarios, tiene tanto de mí, que no podría elegir. Sin embargo, siento que el proyecto de Martes de Poesía, del que luego hablaremos, ha sido el camino que me ha permitido unir mis dos pasiones y entregar lo mejor de mí, así como abrir nuevos caminos.
4.- ¿Existe algún autor que haya marcado tu escritura?
-. He sentido la huella amorosa de muchos escritores que he disfrutado a lo largo de mi vida. Cada lectura de una buena escritora o de un buen escritor te ofrece siempre elementos que, de alguna manera, hacen presencia en tu escritura. Por ejemplo, en mis búsquedas en la poesía erótica, los textos de Marina Colasanti (italo-brasileña) y de Laura Victoria (colombiana). En mi poesía para niñas y niños, encontrar a las argentinas María Elena Walsh y Liliana Bodoc fue fascinante. Insisto, esto sólo como ejemplo.
5.- ¿Qué significa ser mujer y además escritora en Latinoamérica?
-. Significa tener la posibilidad de agradecer el camino andado por las mujeres que nos antecedieron en las luchas por los derechos en todos los ámbitos de la vida. Significa tener la certeza de que es indispensable ser testimonio de la fuerza femenina y la escritura literaria, producto de un trabajo consciente y constante.
Ser mujer en América Latina significa continuar luchando con una cultura del patriarcado que, incluso, está dentro de nosotras robándonos la posibilidad de ser y proyectar con mayor fuerza todo lo que somos. Significa tener consciencia social, tener la certeza de que la equidad y la justicia social son posibles. Y que nosotras somos profundamente revolucionarias.
6.- ¿Qué opinas cuando se dice que la poesía es pariente pobre de los géneros literarios?
-. Esa es una afirmación que tiene que ver con el mercado del libro y la literatura. Los libros de poesía no se venden de la misma manera que los de narrativa, porque culturalmente estamos más habituados a los relatos, a las historias. Contamos historias todo el tiempo.
En cambio, no tenemos consciencia de cuánto habita la poesía nuestras vidas. Desde que estamos en el vientre de nuestra madre, ella está con nosotros. Pero, a medida que avanzamos hacia la adultez, diferentes elementos tienden a distanciarnos de ella, particularmente en una cultura en la que todo es medido por su funcionalidad. Debe “servir para algo” y esto debe hacerse evidente. Su “uso” debe ser explícitamente claro. Y eso no ocurre con la poesía. Han tratado de manosearla y manipularla con esa orientación. Pero la poesía siempre está marcada por la libertad.
Definitivamente no creo que haya razón alguna para considerarla una “pariente pobre de los géneros literarios”. Además, porque ella no necesita tener este parentesco. La poesía es un género literario en sí misma. Y, lo más importante, es la que nos permite, como seres humanos, hallarnos, encontrarnos y comunicarnos desde lo más profundo de nuestro ser.
7.- Según tu criterio, ¿existe una literatura de mujeres o es simplemente literatura?
-. Considero que la literatura es literatura. La discusión de si existe una literatura de mujeres se mantiene, con argumentos a favor y en contra, y con intenciones buenas y no tanto. Pero creo que lo importante es que estamos haciendo una literatura excelente, que, tal como decía, Eugenio Montejo, “hace que el idioma se ponga de pie”. Y que, a través de nuestras producciones, generamos preguntas fundamentales y trazamos rutas que nos permiten ser, como individuos y como parte de nuestras comunidades. Eso es lo importante
8.- ¿Crees que hay obras y autores que solo persigan el entretenimiento del lector?
.- Creo que sí. En una sociedad consumista, como la nuestra, resulta, en muchos casos, más importante vender que escribir con calidad. De ahí que tú encuentras la categoría de “Best seller”, que significa “mejor vendido”. Y ese reconocimiento suele tener mayor popularidad que los premios de literatura de gran trayectoria
9.- ¿El escritor debe ser y estar comprometido con su tiempo?
.- Claro que sí. Los escritores tenemos el don de mostrar a nuestros congéneres y a otras generaciones, con la magia de la literatura, lo que no les es visible de otra manera. La literatura nos da la posibildad de ir por encima de la razón para comunicar aquello que, en muchas ocasiones, es tan dificil que no queremos aceptar.
10.- Háblanos por favor de que trata el Taller de poesía: La música de la palabra, en el vientre.
.- Este es un taller que he venido construyendo con mujeres gestantes de todas las edades. Tiene como propósito ayudarlas a re-descubrir su relación con la poesía a partir de los latidos del corazón propios y los del bebé en formación. Es muy interesante lo que ocurre en estos talleres, porque estas mujeres se descubren en su felicidad hecha palabra poética y, por supuesto, en su hijo en el vientre. Cada vez que he orientado este taller la experiencia ha sido absolutamente distinta.
11.- Como ya dije anteriormente tienes un extenso currículo, en él existe un proyecto que nos llega cada semana a nuestros correos, háblanos por favor deartes de Poesía.
.- Martes de Poesía es una experiencia de disfrute de la poesía que empezó como un juego con los niños y niñas de primaria de la I.E. Esteban Rojas Tovar, en el municipio de Tarqui-Huila. Luego, cuando fui a trabajar al municipio de Hobo, en el mismo departamento, este juego tomó aún más fuerza. Yo visitaba a los niños en su salón de clases, e irrumpía con el permiso del maestro, para leerles un poema. Les contaba quién lo había escrito y un poquito de cómo había sido su vida. Pero, sobre todo, les hablaba de ese escritor como un niño que descubría el mundo cada día. Creo que esto permitió establecer una relación muy especial con los textos poéticos, porque, además de su musicalidad y sus imágenes maravillosas, las niñas y los niños encontraban allí a un compañerito que jugaba con las palabras y el mundo
Al principio les resultaba muy extraño que, una persona que no era su maestra, llegara a leer para ellos un poema y no les dejaba tareas ni compromisos. Así que empezaron a disfrutar cada vez más esta “aparición” repentina los martes y comenzaron a contarles a sus padres y familia lo que estaba sucediendo. Les resultaba muy llamativo porque era, como dijo una niña en una ocasión, “como si aterrizara un ovni en el salón”.
Yo llevaba el libro de poesía y leía para ellos, en voz alta, el poema que había elegido. El criterio más importante para elegir el texto era que a mí me hiciera vibrar la niña que siempre he sido. Porsupuesto, mi experiencia como maestra de literatura, por más de 20 años, y mi pasión por la poesía, aparte del hecho de ser también escritora, propiciaban, de hecho, una selección de muy buena calidad.
Un día, mientras leía el poema, en medio del silencio acogedor que siempre acompañaba el momento, una niña preguntó “y de verdad, profe, ¿ahí dice eso?”. La pregunta fue como una nube que se corre para dejarnos disfrutar de un rayo de sol que nos hace sonreir. Yo asentí con mi cabeza y los invité a venir al libro para que vieran que allí decía eso. Pero aproveché para preguntarle por qué lo había dudado y ella y otros niños dijeron que en los libros no decían cosas tan lindas.
Qué maravilla! Los niños estaban descubriendo que en los libros había más que información y tareas.
Después de eso, y con la complicidad del profesor de artes, les llevaba el poema en cartelera, para que todos pudieran verlo y seguirlo conmigo. Incluso, querían leerlo ellos, después de que yo se los leía. Era mágico. Como una oleada de sueños que venía en sus voces. Se reían cuando alguien se equivocaba y aseguraban “así no lo dejo la profesora”.
Ahora los chicos querían saber si los libros donde estaban los poemas se encontraban en la biblioteca del colegio. Y no. No estaban. Porque en la biblioteca, como generalmente ocurre en todas las bibliotecas escolares, hay muchos textos para hacer tareas, pero pocos para sentarse a disfrutar del lenguaje y de la poesía. Entonces yo les dejaba mi libro en la biblioteca durante la semana, para que pudieran ir allí y leerlo. A veces, a la semana siguiente, cuando yo llegaba con el poema en cartelera, algunos de los chicos ya lo habían leído y hacían coro a mi voz, gozándolo de una manera distinta
Sé que aquí no puedo contar con detalle las cosas maravillosas que han sucedido desde el año 2000 hasta la fecha, pero no quiero irme sin contarles que, Martes de Poesía se convirtió en una actividad irremplazable para las niñas y niños del colegio. Que luego, además de la lectura, empezamos a hacer taller de escritura y que, en el año 2012, el día del grado de bachiller del grupo con el que había iniciado la actividad, les entregué una antología de sus textos con lo cual, la ceremonia de graduación fue, además, un recital de poesía cuyos autores estaban presentes.
La experiencia continúa creciendo. Y he tenido la oportunidad de compartirla a través de eventos académicos en Cuba, Estados Unidos, Perú, Chile y Argentina. Con ello, otras maestras y maestros han empezado a creer más en sus sueños con la literatura y los niños. No importa que eso no “aporte” al aumento de los puntajes en las pruebas ICFES; lo importante es cuánto les aporta para la vida.
Desde PRENSAMÉRICA, un saludo especial a las Mujeres Colombianas en su día.
Espero nos encontremos pronto con un nuevo reportaje.
