Guayaquil-CGN Noticias-Prensamérica Ecuador.- El padre José Carlos Tuárez, consejero electo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), está dispuesto a liderar un proceso de recolección de firmas para convocar a una Asamblea Nacional Constituyente, si es que la clase política insiste en modificar la estructura del Estado con la eliminación del CPCCS o la limitación de sus atribuciones.
Relató que su postulación se debió al pedido que le hicieron las Juntas de Aguas de Manabí, a las que calificó como “el pueblo olvidado, sencillo, que está harto que los políticos piensen en unos pocos y no en la gente pobre”. En este marco, rechazó la pretensión de políticos de pensar solo en sus familias y en ellos y no en los demás. “Este es mi llamado al respeto, a la Constitución, a las y los ecuatorianos, a cada una de las funciones del Estado”.
“Todos somos políticos, pero yo no me debo a ningún partido político, que es otra cosa. Creo que los sacerdotes, no solo estamos para darnos golpes en el pecho, sino para actuar. Muchos son los primeros que han hecho puentes en el Ecuador, otros estuvieron en la fundación en 1830 en la Constitución de Riobamba. Es decir, la teología no solo está para ir a rezar, sino para construir, sumar y edificar”, añadió.
A su criterio, no le pueden coartar la libertad de ser ciudadano porque antes de ser sacerdote, es ciudadano. Según comentó, la Iglesia le dijo, desde un principio, que no estaba de acuerdo con su participación, sin embargo, Tuárez aclaró que no actuó en representación de la Iglesia, sino a la ciudadanía.
Confirmó además, que no ha hablado aún con el Padre Provincial, pero que ya ha pedido un año de exclaustración, es decir, seguirá siendo fraile, pero no seguirá viviendo dentro del convento. “Esto significa que yo seguiré siendo religioso, pero podré vivir afuera del claustro”.
“Yo actuaré conforme sea para hacer el máximo bien posible desde el CPCCS. Por ejemplo, vamos a luchar por la vida desde la concepción. Yo soy un sacerdote pro vida, pro familia, pro salud, pro lucha contra las drogas. Hablaré con las autoridades respectivas para que haya un verdadero entendimiento entre la ciudadanía y el Estado”, añadió.
Negó ser “correísta”, “nebotcista”, “lassista”, etc. y reiteró que actúa en representación de la ciudadanía. A su criterio, es muy precario calificarlo con esos términos. “¿Cuándo trabajé con el señor (Rafael) Correa, yo? Nunca he tenido contacto con él. Le conocí cuando sus hijas estaban en La Condamine y yo daba clases de catequesis aquí en Las Casas (norte de Quito). Ahí era padre de familia, ni siquiera Ministro”.
“Sin embargo, la gente en el Ecuador, a veces nos adelantamos y hay que tener un poco de prudencia. Uno no puede ser ni de Correa, ni de Nebot, ni de Lasso, ni de Balda; de nadie, se debe ser de Dios y de la gente”, acotó.
“No sé por qué se ensañan con nosotros. Nos quieren tirar abajo a nosotros, al poder ciudadano porque los políticos nos tienen miedo. Nosotros somos los favorecidos del pueblo. Llegamos a donde estamos no de gratis ni por alguna designación a dedo, sino por un voto popular que nos da plena legitimidad. Se quieren distribuir la torta, como fue antes. Los ecuatorianos no lo podemos permitir, en cuanto haya eso, la población tiene que levantarse y pedir una Constituyente”, advirtió.
El religioso reiteró que no permitirá que la clase política quiera romper la estructura del Estado. “Así le pregunten al pueblo ecuatoriano si es que quiere que el CPCCS sea eliminado y se manifieste en las urnas, tampoco se puede. La única vía legal, entiendan ecuatorianos, es una Asamblea Nacional Constituyente”.
“La Asamblea Nacional quiere restarnos competencias, pero eso no se puede. Le invito al doctor (Julio César) Trujillo, a quien quiero y respeto, y que va a pedir firmas para una consulta popular para eliminar al CPCCS; a acompañarlo, pero para que haya una nueva Asamblea Nacional Constituyente. Allí es donde las cosas se harán mejor”, insistió.
A criterio de Tuárez, lo que necesita el pueblo ecuatoriano es paz, trabajo y salud, ya no otro llamado a las urnas. Por lo que convocó a los transitorios a mantener la calma y a considerar que su elección fue hecha a través de una terna, no por voto popular. “Tranquilícense, trabajemos en paz por el Ecuador, no traigan más problemas porque ya tenemos muchos y les pediría que ya no nombren autoridades de control, dejen a los nuevos”. Está dispuesto además, a revisar las actuaciones de los transitorios si es que existe una denuncia ciudadana.
Ha visto también varias propuestas, en redes sociales, de diferentes sectores, que lo propondrían como Presidente del CPCCS, sin embargo, el sacerdote dejó en claro que no tiene ningún tipo de aspiración. “Yo, para lo que quiero llegar al curul, es para servir. Eso ya lo decidirán mis compañeros y compañeras”.
Asimismo, aseguró conocer a los miembros del CPCCS también electos. Manifestó su respeto para con las mujeres y los varones. “Yo veo que hay un espíritu de servicio en todos mis compañeros, pero como yo, están asustados por tantas cosas que nos dicen. Nos quieren hacer como un aborto, el niño está en la pancita de la madre y ya nos quieren matar. Hay que recibir a los nuevos consejeros con confianza, no vamos a traer disturbios, sino paz y días de progreso para el Ecuador”.