CHILE.- Ha sido la pauta que ha marcado la agenda noticiosa de la última semana, desplazando el interés de la prensa nacional en los centenares de muertos y pérdidas materiales causadas por el incendio ocurrido en el Gran Valparaíso. Como ya es sabido el exmandatario Sebastian Piñera perdió la vida en un accidente en el lago Ranco que terminó movilizando a toda la institucionalidad existente para su rescate: Desde su familia, amigos, hasta las Fuerzas Armadas, bomberos. Toda una maquinaria. Lamentablemente, no en todo lado se visualizó dicha rapidez, hay familias que aún esperan que sus familiares sean retirados de la zona de catástrofe por el Servicio Médico Legal (SML). Por último, hemos visto un gobierno dirigido por quienes, en el pasado, fueron sus grandes adversarios y persecutores por las violaciones a los DDHH ocurridas durante el Estallido Social. Pero hoy ese mismo sector político, hoy lo alaban como un gran demócrata y estadista. ¿Que está sucediendo en Chile?
Deseo ser muy enfático que el Exmandatario, su familia y cercanos, merecen todo el respeto. Sebastian Piñera debe tener todos honores de estados correspondientes a su figura de expresidente como lo establece Decreto 171 (16 marzo del 2017) M. de Relaciones Exteriores. Esto en relación con los tres días duelo de estado. Pero otra cosa muy distinta es la reconstrucción de la imagen de un santo secular creando una figura inexistente o definitivamente que cambia toda la historia reciente de nuestro país.
La secularización es el paso de algo o alguien de una esfera civil a una esfuerzo teológica, religiosa o casi milagrosa. En el ámbito de la Cultura en general, el conocido Psicólogo Jung establece la figura de arquetipo, Héroe o Santo Secular proviene de la observación recurrente de que los mitos y cuentos populares contienen siempre ciertos episodios cargados de emotividad. Esta construcción de imagen se sustenta también en las fantasías, sueños, pensamientos y delirios sociales contemporáneos; provienen, según esta teoría, de una preforma inconsciente que parece pertenecer a la estructura heredada de la psique y que es acompañada de fuertes matices afectivos que impresionan y fascinan.
También es interesante traer a la palestra al escritor estadunidense Joseph Campbell. El autor del libro “El Héroe de las Mil Caras del año 1949” defendió el mito como una panacea no sólo para resolver los problemas psicológicos particulares, sino también para afrontar los problemas sociales, y atribuyó muchos de los conflictos humanos a la ausencia mitos fuertes en el mundo contemporáneo. En la construcción de un “supuesto héroe” es la esencia en la construcción de su identidad entre otras. Esto por medio de una muerte trágica o impactante o acciones normales trasformadas en heroicas entre otros ejemplos señalado en su trabajo.
¿Quizás podemos describir una especie de Síndrome de Estocolmo social en donde la gente apoya a sus torturadores que durante el estallido social mutilaron a cientos de jóvenes? Los cuales como Gustavo Gatica o la Senadora Campillay nunca más volverán a conocer la luz de la democracia. No entiendo algunas personas de Coyhaique, región de Aysen. Donde las protestas del año 2012 una serie de fuertes movilizaciones sociales acontecieron con los primeros mutilados oculares por acciones policiales.
Como sociedad no podemos olvidar que solo hace solo un par de años atrás durante el Estallido Social hubieron más de 400 mutilados oculares, 40 asesinados y personas desaparecidas. La impunidad del exmandatario y olvidar lo acontecido es una vergüenza en materia de DD. HH y un grave negacionismo social. Tristemente tras las palabras del gobierno, da pie para que el Juzgado de Garantía de Santiago anuncie el sobreseimiento definitivo de las causas durante el gobierno de Sebastián Piñera, tras su fallecimiento y todas las de ese periodo.
El lavado y la construcción de una nueva imagen al estilo que lleva adelante, la prensa y sus cercanos políticos es definitivamente muy esperable. Pero lo más indignante no son los comentarios de ese sector, sino que el silencio de los supuestos partidos de izquierda oficialistas y sus dirigentes locales y regionales en silencio olvidándose de su pueblo y tranquilos y callados en sus puestos de confianza. (Aunque destaco a la Diputada Carmen Hertz por ser unas de las pocas en alzar la voz)
El silencio de la política tradicional de los partidos oficialistas y del gobierno. Una gestión mediocre que ha llevado a la crisis política en la que estamos inmersos. Aun no superamos el nefasto discurso del expresidente Patricio Aylwin cuando retornó la democracia en los 90 señalo: “Justicia en medida de lo posible” dándole una cachetada a todas las víctimas de 17 años de dictadura. Hoy es indignante esa misma cachetada a los cientos de mutilados y todos los ciudadanos que vieron vulnerados sus derechos y creyeron en un proyecto de cambio.
No por causa de los que hacen el mal, sino por aquellos que no hacen nada por evitarlo". "El mundo es un lugar peligroso. Albert Einstein. Deseo terminar esta columna con una fábula publicada en una columna anterior, que representa el momento político que nos encontramos viviendo:
“El león que quería ser cordero”
Érase una vez……. Una camada de leones que, de la manera más inesperada, se vio asaltada por un grupo de cazadores. Tan sorprendidos quedaron aquellos animales que, en apenas unos instantes, ni uno de ellos quedo con vida. Solamente un cachorrito león, que consiguió esconderse bajo unas matas y contemplo horrorizado como los cazadores daban muerte a todos los leones e incluso a su familia.
Allí se quedó escondido hasta que, al cabo de unas horas, apareció un rebaño de ovejas que, compadecidas de este león bebe, lo acogieron y lo convirtieron en uno de los suyos. En un principio al león bebe, no terminaba de gustarle el balido de las ovejas. Le costó mucho trabajo acostumbrarse al sabor a la hierba. Incluso le causaba una perplejidad muy grande, el ver que sus compañeras no tenían garras. Sin embargo, poco a poco y con el paso del tiempo, el león bebe llego a la conclusión de que era una oveja más. con menos lana, con menos blancura, con dientes más grandes, pero al fin de cuentas era una oveja.
Así paso mucho tiempo, cuando, de pronto, una mañana, mientras las ovejas se desplazaban por la pradera, se escuchó el rugido poderoso de un león. Y el león, muy vigoroso, se lanzó sobre aquellas ovejas. Todas echaron a correr inmediatamente y también lo hizo el leoncillo. Pero el león, que inmediatamente se percató de aquello, no era un corderito sino un cachorro de su propia especie, dejo de correr y agarro por el cuello al cachorro leoncillo que estaba a su lado.
--¡tú eres uno de los míos…… le dijo el león adulto,
Pero el leoncito estaba aterrorizado, temblaba y porsupuesto, no podía creer que aquella violenta fiera fuera de su especie. El leoncillo quería seguir siendo oveja.
El león adulto, al ver sorprendido que sus palabras, no hacían mella en el lencillo, se lo llevo a un arroyo. Lo coloco a su lado y entonces, el leoncillo pudo ver que era extraordinariamente igual que aquel león más veterano. Mas pequeño, quizás con dientes y garras más pequeñas, pero también un león.
Y en ese momento su vida cambio para siempre, descubrió que no era, en absoluto, una oveja como aquellas con las que había vivido, sino ahora era una poderosa fiera.
A diferencia del protagonista de nuestra historia, que por azar de la vida el Lencillo, desde el interior de su alma estaba convencido que él era una oveja. Lamentablemente hay personas que saben muy bien que son leonés, lobos o cazadores, pero se hacen pasar por blancas ovejas.
Aunque soy partidario y vote por este gobierno. Hoy me pregunto: ¿El Oficialismo, son solo ovejas o siempre fueron leones? Usted tiene la respuesta querido lector……………………….
De Autor:
Miguel Ángel Rojas, Papá. Psicólogo Clínico y Educacional, Profesor de Historia y Cs. Políticas, Post Título en Orientación Vocacional, con estudios de Doctorado y Magíster en Educación y Convivencia Escolar. Bombero y Libre Pensador. Académico Universitario.
Columnista en Diario El Trabajo (Valparaíso) y Tehuelche Noticias (Aysén). Editor y columnista Prensamérica Chile. Ha escrito variados artículos en relación con la Psicología Educacional. Autor de los libros “Voyager 1, Viaje al Corazón” Guía Práctica para Trabajar el Autoestima” y “Desperté, Crónicas de la Revolución de Octubre”. Con más de quince años de experiencia en el ámbito educacional donde ha ejercido diversas funciones docentes y directivas.