Por: María Victoria Maldonado Godínez
Es acaso la vejez,
el ocaso de la vida,
recordar lo que fue una vez,
toda experiencia vivida.
¿Qué será de ti?
Viejo querido,
¿quién te extrañará?
cuando ya hayas partido.
¿Cómo será tu ocaso?
Feliz, matiz, gris actriz,
de color, olor, sabor, actor,
quien te brindará su brazo.
Tus pasos lentos darás,
torpes pausados e inseguros,
lo que ayer veías hoy ya no verás,
viviendo los minutos sin más apuros.
Tu soledad tal vez se mitigue,
con un canto, llanto, santo, manto.
tu pena, condena, y suena, cual quena,
de frío hastío, tardío, abuelito mío.
Quisiera para ti un fin alegre,
feliz como el canto de las aves,
que en tus últimos años se integre todo tu amor, experiencia y lo que tú sabes.
Tu saber es gran fortuna,
legado que creó, creció, crio, creyó,
formó, fortaleció, forjó.
por eso, gracias por lo que nos ha brindado.
Con un fraternal abrazo para todas las personas de la tercera edad que nos leen.
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Comentarios
Emotivas preguntas, ¿qué será de ti, Viejo?
me siento privilegiado!!!
por leerte!!